El edificio más colorido de Giresun llama la atención de los que lo ven

En una de las calles más concurridas de Giresun, la calle Gazi, un edificio con balcones cubiertos de coloridas flores llama la atención de los transeúntes, destacando como una obra de arte entre las masas de concreto.

Comenzando hace aproximadamente 10 años en la calle Gazi, las labores de embellecimiento del edificio cubrieron todo, excepto las ventanas, con flores de colores brillantes, mientras que el interior recuerda a un museo de etnografía.

Fikret Gürsoy, propietario del edificio y gerente del café en el mismo, que expresa que el interior del edificio es un reflejo de su mundo interior, dijo: “Después de heredar el edificio, mi esposa y yo decidimos convertirlo en un café después de pensarlo por un tiempo. Desde 2013, hemos estado embelleciendo el edificio meticulosamente. No sé cómo lo logramos. No teníamos un plan específico, pero cada año agregábamos más flores y rosales trepadores. Después de más de 10 años, llegamos a este punto. Se ha convertido en un edificio que quizás refleje nuestro mundo interior. Es decir, en cada centímetro de este colorido edificio, hay más de 10 años de esfuerzo y amor”.

Exterior de jardín de flores, interior de museo de etnografía

Invitando a aquellos que solo ven el exterior del edificio a ver también el interior, Gürsoy dijo: “Los que ven nuestro colorido edificio solo ven el exterior. Sin embargo, también trabajamos para agregar una belleza que vale la pena ver en el interior. En cada piso del edificio que administramos como café, reunimos objetos antiguos utilizados en los hogares de años pasados para crear una atmósfera de museo con nuestros propios medios. Además, también intentamos dar la bienvenida a los pájaros en nuestro espacio. En las casitas de pájaros que hicimos, cada mañana los pájaros cantan, dándole a nuestros clientes la sensación de estar en medio de la naturaleza. Recientemente, también hemos plantado un árbol de mariposas, con la esperanza de atraer mariposas pronto”.

Gürsoy, quien con este trabajo dedicado busca crear conciencia en la ciudad e inspirar a las personas a decorar sus balcones, también mencionó: “Nunca he tomado una foto de nuestro edificio. Siempre veo a otros tomar y compartir. Estamos muy contentos de que nuestro edificio decorado con flores esté recibiendo atención, pero no queremos que solo tomen fotos, los invitamos a venir y tomar un té con nosotros. Vengan, conózcanos, tomen un té o café, verán que también hay recuerdos para guardar dentro de nuestro edificio. Si pudimos crear conciencia en nuestra ciudad, nos alegra. Si alguien quiere embellecer sus balcones, siempre estamos listos para ayudar. Les ayudaremos a obtener las rosas y flores que deseen. Porque saber que nuestras rosas y flores están floreciendo en los balcones de otros nos hará felices”.